Me siento bien

Hacía mucho tiempo que no entraba por aquí, un abandono para nada premeditado, simplemente no he tenido esa chispa necesaria para escribir algo en condiciones, pero ya estoy aquí.

Son días de continuos cambios, sin saber muy bien que decisión tomar para que a nadie le moleste, pero ha llegado el momento. Un momento para ver que cuando el hambre acecha somos capaces de comer lo más valioso que tenemos.

En estos meses, he cambiado bastante, según mi punto de vista; he adquirido una independencia que ya necesitaba, y he limado las asperezas de mi personalidad, y para nada en vano. Porque he sabido mirar más allá de mis narices descubriendo cosas que siempre he tenido y nunca he valorado, personas que ahora me hacen sentir bien sin tener que dar explicaciones o miedos al recelo. Esas personas están lo bastante cerca como para darme cuenta de que los que creí tener a mi lado, estaban ausentes todo este tiempo. Un hecho vale más que mil palabras, palabras que antes creía sinceras. Estoy viendo como se convierten en monstruos, en pura mierda incapaz de sentir nada bueno. Ese agujero que ahora les consume será su tumba, pues ellos las han elegido.

¿Mi tumba? Aun no está creada, porque pasito a pasito voy viviendo la vida que yo he diseñado para mi y para la gente que de verdad me importa, ¿cual es esa gente? todos aquellos a los que yo importo aunque sea un poquito.

Se presenta un mes complicado, pero se que tengo gente con la que compartir, porque lo bueno nunca es lo mejor, pero tampoco lo malo es lo peor...

Y pensaba no volver aquí a escribir párrafos que algunos creen sin sentido, pero es así como me salen, como se crean dentro de mi. Liberar sensaciones me hace sentir bien, y ahora, me siento bien!